Fraudes hegemónicos y democracia
en vilo, del siglo XIX al México 2018
La democracia, cual dinosaurio, es fósil viviente que a
su vez da vida en respectivas naciones a correspondientes sistemas políticos y
de gobierno, como es el caso de México, donde siempre en vilo la democracia ha
permitido tanto relevar gobiernos como eternizarlos en el poder.
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Fraudes hegemónicos y democracia en Vilo,
del siglo XIX al México 2018. Eduardo Garibay Mares : ENLACE PDF
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Eduardo
Garibay Mares
Julio 2
de 2018
Universitario
Ejemplo
de Actuales y Futuras
Generaciones en la
Universidad Michoacana
de
San Nicolás
de Hidalgo |
Porque
la democracia nació con trampas para beneficio de los pocos que integran grupos
de poder económico, político y social, desde que los griegos la implantaron 500
años antes de Cristo, se engañan a sí mismos quienes al cobijo y usufructo de
la democracia mexicana, se desgarran las vestiduras o se congratulan por lo
ocurrido en torno al proceso electoral, que conllevó a las votaciones ciudadanas
el 1 de julio de 2018, en los tiempos normados por el Instituto Nacional
Electoral, INE, a fin de reconocer legalmente tanto al ganador del cargo a la presidencia
de la República, como de los demás cargos de elección en ámbitos federal,
estatal, municipal, y de la Ciudad de México; y gracias también a la
participación de casi un millón y medio de ciudadanas y
ciudadanos responsables de que casi 90 millones de personas pudieran votar y
que sus votos se contaran.
Democracia para relevar gobiernos
o eternizarlos en el poder
La
democracia, cual dinosaurio, es fósil viviente que a su vez da vida en
respectivas naciones a correspondientes sistemas políticos y de gobierno, como
es el caso de México, donde siempre en vilo la democracia ha permitido tanto relevar gobiernos como eternizarlos en
el poder.
De
ahí que entre algunos fraudes hegemónicos y democracia en vilo, ocurridos a
partir de la histórica etapa Independiente,
iniciada con la Independencia de México, suscrita el 28 de septiembre de 1821;
y pasando por la etapa de Reforma,
también en el Siglo XIX, así como por la de Revolución
Mexicana, culminada con la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, promulgada el 5 de febrero de 1917; hasta llegar al México 2018
actual, donde la historia documenta que la democracia igual se ha usado para
relevar regímenes de gobierno que para eternizar gobernantes en el poder.
La
democracia, cual dinosaurio, es fósil viviente que a su vez da vida en
respectivas naciones a correspondientes sistemas políticos y de gobierno, como
es el caso de México, donde siempre en vilo, la democracia ha permitido tanto relevar gobiernos como eternizarlos en
el poder.
Benito Juárez y sus
reelecciones presidenciales con el voto del pueblo
Perpetuación
democrática en el poder que documenta la historia cuando Benito Juárez, quien luego
de ser presidente interino de 1858 a 1861, se eternizara en el Poder Ejecutivo
al resultar electo por el pueblo no sólo para el periodo 1861-1863, sino al
contender por la presidencia de la República contra Porfirio Díaz, al que
democráticamente derrotó para los periodos 1867-1871 y 1871-1875.
Muere el presidente Juárez y
su sucesor Lerdo de Tejada amnistía a los rebeldes
Siendo
presidente de México Juárez murió el 18 de julio de 1872 en Palacio Nacional,
donde vivía con su familia, y fue sucedido por Sebastián Lerdo de Tejada, que
interinamente asumió la presidencia y ofreció amnistía a los rebeldes.
Innata democracia fraudulenta
igual imperante en el Siglo XIX
Esto
es, que Díaz contendió contra Juárez en 1867 y luego en 1871 como candidato a
la presidencia de la República, siendo derrotado las dos veces, por lo que al
denunciar lo fraudulento de las elecciones se levantó en armas el 8 de
noviembre de 1871, proclamando el Plan de la Noria contra Juárez.
Corrupción democrática que
Días combatió como candidato presidencial
Corrupción
democrática sempiterna que Díaz combatió al rebelarse de nuevo contra la
reelección, mediante el Plan de Tuxtepec, cuando además de desconocer a
Lerdo de Tejada, y demás electos en julio de 1875, así como a funcionarios y
empleados por él designados, al proponer que la no reelección tuviese carácter
constitucional, cuestionó que la democracia, el sufragio político y la
independencia de los poderes se hubiesen convertido en una farsa, pues el
presidente y sus amigos en el poder desfachatadamente hacían llegar a los
puestos públicos a los “candidatos oficiales”, imposibilitando el acceso a todo
candidato independiente.
Del discurso de campaña
electoral hacia el logro del poder presidencial
Lo
innato de la democracia fraudulenta se documenta cuando al oponerse Porfirio
Díaz en 1871 a la reelección de Benito Juárez, con el Plan de la Noria Díaz señaló,
entre otras cosas:
- Que
la reelección indefinida, forzosa y violenta del presidente ponía en peligro
las instituciones nacionales;
- Que
en el Congreso una mayoría regida por medios reprobables y vergonzosos, hacía
ineficaces los esfuerzos de diputados independientes y convertía la
representación nacional en una cámara cortesana, obsequiosa y resuelta a seguir
siempre los impulsos del presidente;
- Que
varias entidades federativas se hallaban privadas de sus autoridades legítimas
y sometidas a gobiernos impopulares y tiránicos, impuestos por la acción
directa del presidente y sostenidos por las fuerzas federales;
- Que
la elección debía ser directa, y que nadie se impusiese y perpetuase en el
ejercicio del poder.
Porfirio Díaz y su
implantación electoral en el poder presidencial
Posteriormente,
al reelegirse Lerdo de Tejada, Díaz se lanzó de nuevo a la lucha armada
proclamando el Plan de Tuxtepec, el 10 de enero de 1876, año en que
triunfó militarmente y resultó electo presidente para el periodo 1876-1880.
En
su primer periodo presidencial Díaz hizo cambios constitucionales para eliminar
la reelección.
Sin
embargo, el presidente Díaz decidió la elección de su compadre Manuel González,
que al sucederlo como presidente, en el periodo 1880-1884, realizó reformas
pertinentes para la reelección de Díaz, quien así pudo mantenerse en el poder
desde 1884 hasta 1911.
Perpetuación
de más de tres décadas en el poder de Porfirio Díaz como presidente del país, que
es antecedente favorable tanto a partidos políticos como a ciudadanos electos a
cargos, y a gobernantes estatales y legisladores, sin llegar, hasta ahora, a la
reelección del Titular del Poder Ejecutivo Federal, que actualmente tienden a
perpetuarse en el poder, en detrimento siempre de la población mayoritaria,
igual que desde la implantación de la democracia en Grecia.
Sí,
un lapso en que su gobierno dictatorial se sustentó en la represión cruenta, a
través del Ejército, rurales, y diversos cuerpos policiacos irregulares, con lo
que asimismo eliminó cualquier tipo de disidencia política en el país y
garantizó, para sí mismo y los intereses de la élite, un país tranquilo,
ayudado de intelectuales afines y de políticos igualmente dictatoriales como
fueron, por ejemplo, los gobernadores estatales, que similarmente se
mantuvieron en el poder durante 20 o más años.
Corolario
Así
las cosas, urge arribar a una democracia más directa, cuyas formas de
participación política permitan erradicar la democracia representativa,
empezando por cargos de representación proporcional, a fin de subsanar
deficiencias de origen de la democracia, que nunca ha dado para más ya que fue
creada por y para las élites.
Democracia
en vilo que daña cada vez más la unión de los mexicanos, y que debe dejarse
atrás para encontrar un nuevo orden, donde el pueblo todo tenga a su cargo el
Estado mexicano y el bienestar común.
Ni más
ni menos.
Fraudes hegemónicos y democracia
en vilo, documentados a partir de la histórica etapa del México Independiente, y pasando por la etapa de Reforma, también en el Siglo XIX, así
como por la etapa de Revolución Mexicana,
iniciada en 1910, hasta llegar al México 2018 actual
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