viernes, 8 de mayo de 2015

Hidalgo y la crisis política de 1808 ante la crisis mexicana en 2015. Eduardo Garibay Mares

Hidalgo y la crisis política de 1808 ante la crisis mexicana en 2015

Eduardo Garibay Mares
Mayo 8 de 2015

En este 2015, al rememorar el aniversario luctuoso del iniciador de la lucha armada por la Independencia de México, don Miguel Hidalgo y Costilla Gallaga, muerto en la ciudad de Chihuahua el 30 de julio de 1811 por las balas del pelotón de fusilamiento virreinal, el mensaje a los gobernantes y autoridades que integran el Estado mexicano, así como los dirigentes y militantes de los partidos políticos del país, es que tengan presente que por la respectiva irresponsabilidad de acciones de aquellos que impunemente dañan al pueblo y ponen en peligro a la República, por el mero afán de arribar o permanecer en sus cotos de poder, hoy incuban un creciente contexto favorecedor del deterioro de la vida nacional, que puede conllevar al estallido social, en forzada semejanza con la crisis política de 1808 en México, cuyo conjunto de hechos incidieron en la población de la Nueva España y dieron lugar al inicio de la guerra insurgente contra la Corona española.
Sinrazón de la codicia por el poder
Lo malo es que en esta primera década del siglo XXI es la irracionalidad la que conlleva a ocasionar la lucha, esta vez entre los mexicanos, por la sola codicia de poder, a diferencia de la guerra insurgente iniciada el 16 de septiembre de 1810 por Hidalgo, el Generalísimo de América, uno de los insignes héroes forjadores de la nación mexicana, y también distinta a la comenzada el 20 de noviembre de 1910 a partir de que Francisco I. Madero González enarboló el lema “Sufragio efectivo. No reelección”, enfrentado al titular del Poder Ejecutivo Federal, quien sólo así, por la fuerza, el 25 de mayo de 1911 dejó el cargo que desempeñó por más de 30 años, aunque la lucha por el predominio de la democracia prosiguió hasta culminar con la promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917, en la que asimismo se consagró el sistema de gobierno sustentado en la democracia, aunque con todas las virtudes y vicios que en torno a ésta campean, desde que principió en la antigua Grecia más de siglo y medio antes de Cristo.
Sí, el México del siglo XIX, independiente y republicano por el que lucharon los nacidos en esta tierra, a partir de que el cura de Dolores, Miguel Hidalgo, convocó a la lucha al grito de ¡Viva México! ¡Viva la Virgen de Guadalupe!, al tocar la campana de la iglesia y elevar el estandarte con la imagen de La Guadalupana. El México del siglo XX, revolucionario en pro de las garantías individuales y los derechos humanos, de la justicia social, del gobierno democrático, del Estado garante del bienestar de la sociedad social y de la seguridad nacional, del país independiente, soberano y fraterno en la convivencia internacional.

Miguel Hidalgo y Costilla Gallaga. Dibujo a lápiz de Hidalgo cuando estudiante adolescente, Rector del Colegio de San Nicolás Obispo, e iniciador de la lucha insurgente. Obra realizada el 17 de abril de 2005 por Eduardo Garibay Mares.


Crisis política de 1808 en México
En el ámbito político, socioeconómico y militar, en el año 1808 sucedieron un conjunto de hechos que perturbaron a la gente de la Nueva España, mismos que además de acelerar la decadencia del virreinato colonial, gestaron el inicio de la guerra insurgente contra el imperio español.
Una crisis política en torno a la cual se dieron factores detonantes, externos e internos: en lo externo, la invasión francesa a España y la inmediata lucha de los españoles por liberarse de las tropas de Napoleón Bonaparte; y en lo interno, primero, la omnipotencia del virrey José de Iturrigaray, quien durante su mandato fue señalado como corrupto, principalmente por parte de empresarios españoles radicados en Nueva España; y segundo, la información difundida a principios del año 1808, en cuanto a que los franceses habían entrado en Valencia y Sevilla, y que se hallaban a un paso de la capital hispana, así como la noticia del levantamiento del 2 de mayo, en Madrid, que fue conocida por la sociedad novohispana en agosto, mismo mes en que Iturrigaray desconoció a la Junta General del Principado de Asturias, que se proclamó autoridad representante del imperio español, en ausencia del rey Fernando VII, y este hecho fue visto por la sociedad de peninsulares radicados en México como la declaración informal de independencia por parte del virrey Iturrigaray; y tercero, que conocida la noticia de la invasión del ejército napoleónico al territorio de España, los jefes españoles arraigados en México sospecharon que el virrey pretendía independizar al virreinato y erigirse como cabeza de la nueva nación, por lo que con el apoyo del arzobispo de la Ciudad de México Francisco Xavier de Lizama y Beaumont, el hacendado Gabriel de Yermo y otros miembros de la sociedad española en la capital, dieron el primer golpe de Estado en la historia del México colonial, al tomar por asalto el Real Palacio de México, la noche del 15 de septiembre de 1808, y destituir a Iturrigaray de su cargo como virrey.
Insurgencia contra abusos de la Corona hispana en el virreinato mexicano
Otra causal de inconformidad con la Corona española fue la aplicación de la consolidación de vales reales a las élites de criollos, y de peninsulares, que significaba extraer, una vez más, importantes cantidades de la riqueza de México hacia la metrópoli imperial, en perjuicio de gran número de instituciones eclesiásticas y seculares, así como de civiles criollos y peninsulares, de ahí que en diciembre de 1809 se descubriese en Valladolid, hoy Morelia, capital de Michoacán, una conspiración para independizar a la Nueva España, encabezada por el hacendado José Mariano Michelena, quien fue detenido junto con los demás integrantes de la conjura de Valladolid, e igual fueron puestos en libertad en marzo de 1810, por orden del virrey.
Año de 1810 en que al llegar a la Nueva España el virrey Francisco Xavier Venegas de Saavedra, en el mes de septiembre, se gestaba ya en Querétaro una conspiración independentista emprendida por la vallisoletana doña Josefa Ortiz de Domínguez y su esposo, el corregidor Miguel Domínguez, los militares Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Abasolo, conspiración que al ser traicionada y descubierta adelantó el inicio de la Guerra de Independencia de México, comenzada con el Grito de Dolores que fue el ¡Viva México! del entonces párroco Miguel Hidalgo y Costilla, a quien se rememora para el encauce de la vida nacional en bien de México y de su gente.
Insurgencia de la razón contra individuos que sólo atienden intereses propios y de su partido político

Hidalgo, el pensador independentista y revolucionario, y los hechos históricos tanto de su contexto como de la Revolución Mexicana, que ponen en evidencia a los públicos actores de la infamante crisis política que asola al país, recrudecida en este 2015, donde el caos es producto del empecinamiento de tales individuos que sólo atienden al interés propio, de su élite, y de su partido político, sin importarles que hoy México es una nación independiente y soberana, donde libremente, y en condiciones de equidad, llegan a cargos de elección popular quienes como candidatos de respectivos partidos políticos obtienen el mayor número de votos, con alternancia de partidos en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, tanto en cargos federales y estatales, así como en los municipales.

Conmemoración del 5 de Mayo en México y Estados Unidos. Eduardo Garibay Mares

Conmemoración del 5 de Mayo en México y Estados Unidos

Eduardo Garibay Mares
Mayo 5 de 2015

Las armas nacionales se han cubierto de gloria”, escribió el general Ignacio Zaragoza al rendir el parte oficial de la Batalla del 5 de Mayo en Puebla al presidente Benito Juárez, después de intensos combates en que al frente del Ejército de México derrotó al enemigo de la nación.

Invasión francesa en México
México fue invadido por los franceses a principios de 1862, tras declarar el Congreso, en junio de 1861, a iniciativa del presidente Benito Juárez García, la suspensión del pago de la deuda nacional a Inglaterra, España y Francia, por dos años, debido a la bancarrota en que se encontraba la economía de México luego de la Guerra de Reforma, ocurrida de 1857 a 1860.
Al protestar dichos países acreedores contra la medida tomada oficialmente, Inglaterra y España llegaron a un acuerdo diplomático con México, no así Francia, cuyo gobernante Napoleón III vio en tal situación la oportunidad de extender su imperio en América y decidió enviar a sus ejércitos para invadir al país deudor, por lo que después de arribar en Córdoba, Veracruz, en abril de 1862 los franceses emprendieron su campaña militar hacia el centro de la República, trayecto en que la primera batalla importante tuvo lugar en Acultzingo Veracruz, limítrofe con el estado de Puebla, lugar donde el revolucionario Ricardo de Arencibia y sus soldados prendieron fuego a dicha población, entre el 20 y el 26 de abril, para impedir que las fuerzas invasoras acamparan en ese sitio, donde el siguiente día 27 en las cumbres del lugar el Ejército Mexicano, al mando del general Ignacio Zaragoza, efectuó un enfrentamiento con el que detuvo el avance de los franceses.
Batalla de Puebla del 5 de Mayo
Fue el 5 de mayo de 1862 que el general Zaragoza comandó al Ejército en el enfrentamiento contra los franceses, obteniendo en esa batalla de Puebla el triunfo total mexicano, al obligar a los franceses a replegarse. Batalla que constituyó un logro inmenso para México, desde el punto de vista estratégico, porque Zaragoza supo aprovechar la disposición de los fuertes de Loreto y Guadalupe, desde los que se defendió a la ciudad, y con lo que logró retrasar un año el avance del invasor y permitir al gobierno mexicano preparar más a fondo la defensa de la nación, contexto en que más importante aún fue el impacto moral de una victoria donde el pueblo vio que el extranjero no era invencible y que las fuerzas mexicanas habían sido capaces enfrentar y vencer al ejército más poderoso del mundo.
General Zaragoza
Desde muy joven combatiente contra la invasión norteamericana, como parte del ejército liberal Ignacio Zaragoza se distinguió en la Guerra de Reforma, y asimismo en la Batalla de Puebla, ocurrida el 5 de mayo de 1862, lucha en que igual destacó el contingente de indígenas zacapoaxtlas, entre las tropas de valerosos mexicanos de varias partes del territorio nacional, quienes dieron su vida por defender al país. Meses después, el 8 de septiembre, el general Zaragoza murió en la ciudad de Puebla a causa de la fiebre tifoidea.
Imperio francés de 1862 a 1867
Casi un año después los franceses tomaron la ciudad de Puebla, en marzo de 1863, y en unos cuantos meses impusieron su dominio militar sobre el resto del país, en un periodo en que los conservadores mexicanos, así como algunos liberales, se aliaron con los franceses a fin de instituir en México, mediante acuerdo con Napoleón III, una monarquía moderada para que Maximiliano de Habsburgo, archiduque de Austria, se convertirse en emperador, lo cual ocurrió a partir del 12 de junio de 1864, y cuyo reinado duró tres años, cuando fue derrotado y fusilado por los liberales, al mando de Benito Juárez, en Querétaro, en el Cerro de las Campanas, el 14 de junio de 1867.
Festejos en México y Estados Unidos
En México, donde con el lábaro patrio izado a toda asta, en memoria del general Ignacio Zaragoza, se realizan en todo el territorio nacional ceremonias cívicas, ofrendas florales y desfiles cívico-militares, que constituyen celebraciones donde destaca, entre otras, la de San Juan de Aragón, en oriente de la Ciudad de México, aunque es obvio que la mayor es la de Puebla, capital del estado del mismo nombre, donde los festejos inician desde antes con la Feria de Mayo, que ocurre del 30 de abril al 30 de mayo, días de compra-venta comercial en que la población disfruta exposiciones y ofertas de productos industriales y artesanales, de folclor y eventos culturales, así como de la participación de artistas de renombre, y a la que llegan personas tanto del interior de la entidad como de estados circunvecinos, siendo el 5 de mayo cuando tiene lugar el magno desfile cívico-militar.
En tanto, para la población migrante, en Estados Unidos de Norteamérica, Estados Unidos, el significado de esta conmemoración se ha enriquecido más allá del sentido que se le da en México, puesto que los festejos organizados involucran no sólo a los mexicanos, sino a gente de origen latina, tanto de América como de otros países del mundo, por lo que en ciudades con alta concentración de población de origen mexicano, y latino, como por ejemplo en Los Ángeles, San Diego y Sacramento en California; Chicago, Illinois; Dallas y San Antonio, en Texas; Miami en Florida, Denver, Fort Collins y Greeley en Colorado, así como en las ciudades de New York y Washington DC, capital estadounidense, se llevan a cabo celebraciones similares a las efectuadas en la República Mexicana, que allá además comprenden actos de hermandad entre los pueblos, mediante acciones que han hecho de esta fiesta un verdadero símbolo de unión entre los hispanos, por ir más allá del recuerdo de una batalla que, al trascender fronteras y remontar significados, conduce a valorar la defensa de la soberanía del país aunada a los derechos humanos, al tiempo que su reflexión deja ver la importancia implícita que la erige en sustento toral de la comunidad latina.
5 de Mayo de unidad hispana

Defensor de México frente a la intervención extranjera, el general Zaragoza nació en 1829 en Bahía del Espíritu Santo, Texas, entonces territorio de México, y su gesta histórica, sinónimo de unidad mexicana, igual une en Estados Unidos a la comunidad hispana.

Día de la Libertad de Prensa en ámbito mundial. Eduardo Garibay Mares

Día de la Libertad de Prensa en ámbito mundial

Eduardo Garibay Mares
Mayo 3 de 2015

“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Como cada año, eventos efectuados el 3 de mayo pondrán de relieve en el ámbito mundial el Día Internacional de la Libertad de Prensa, a fin de rememorar que fue en Windhoek, capital de Namibia, donde se llevó a cabo en 1991 el “Seminario regional para el fomento de una prensa africana independiente y pluralista”, donde el 3 de mayo de dicho año se emitió la resolución titulada Fomento de la Libertad de Prensa en el Mundo, llamada Declaración de Windhoek, con que se reconoció que una prensa libre, pluralista e independiente es componente esencial de toda sociedad democrática, y cuyo impacto marcó un hito en los medios de comunicación.
Fue para la realización de actos conmemorativos de dicha declaración, que el 20 de diciembre de 1993 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO por las siglas de su nombre en inglés: United Nations Educational, Scientific and Cultural Organzation, a través de la Asamblea General propuso el 3 de mayo Día Internacional de la Libertad de Prensa, por recomendación de su Consejo Económico y Social, mediante la decisión 48/432, e igual desde entonces la Declaración de Windhoek es el primero de una serie de compromisos contraídos para defender la libertad de las personas de todo el mundo de expresar sus opiniones y tener acceso a fuentes de información independientes y diversas.
Precedente constitucional de derecho a la libre expresión en México
Además del reconocimiento a derechos y libertades sociales, libertad esencial de la nación mexicana es la que sustenta el derecho a la libre expresión, considerado fundamental entre otros derechos mandados por rango constitucional y que también son conocidos como garantías individuales, por ser aquellos derechos humanos que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos garantiza como esenciales en el sistema político que funda.
Así es que por estar especialmente vinculados a la dignidad de la persona, dentro de la norma estos derechos tienen un estatus especial por garantizarse su tutela y reforma, y es por ello que constitucionalmente existen dos vías para la tutela de garantías individuales: una, la jurisdiccional, a través de un juicio de amparo ante un juez de distrito, Tribunal Colegiado o la Suprema Corte de Justicia de la Nación del Poder Judicial de la Federación, y otra, la no jurisdiccional, mediante queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, CNDH, o alguna de las comisiones locales estatales.
Plasmados en el texto de la Carta Magna de 1917, entre los diversos objetivos que motivaron la Revolución Mexicana, el artículo 6 manda que “la manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, los derechos de terceros, provoque algún delito o perturbe el orden público; el derecho a la información será garantizado por el Estado”, en tanto que el artículo 7 enuncia que “es inviolable la libertad de escribir y publicar escritos sobre cualquier materia. Ninguna ley ni autoridad pueden establecer la previa censura, ni exigir fianza a los autores o impresores, ni coartar la libertad de imprenta, que no tiene más límites que el respeto a la vida privada, a la moral y a la paz pública. En ningún caso podrá secuestrarse la imprenta como instrumento del delito. Las leyes orgánicas dictarán cuantas disposiciones sean necesarias para evitar que so pretexto de las denuncias por delito de prensa, sean encarcelados los expendedores, ‘papeleros’, operarios y demás empleados del establecimiento de donde haya salido el escrito denunciado, a menos que se demuestre previamente la responsabilidad de aquellos”.
UNESCO contra daños a las libertades de prensa y de expresión
Los progresos en la democracia y en materia de libertad de prensa van de la mano, y ningún país podrá vivir en paz plena sin respeto a los derechos fundamentales, la democracia y el multipartidismo, entre otras cosas, y es para que las autoridades de cada país establezcan condiciones a fin de que haya medios informativos libres e independientes, que la UNESCO tiene el mandato de defender la libertad de expresión y la libertad de prensa, dentro de su marco normativo que en el artículo I le manda asegurar para todos los pueblos del mundo “el respeto universal a la justicia, a la ley, a los derechos humanos y a las libertades fundamentales sin distinción de raza, sexo, idioma o religión”; por eso vela porque los periodistas puedan cumplir con su deber profesional en condiciones razonables de seguridad y no trabajen expuestos al peligro, como lo deja ver el creciente número de fallecidos y heridos, tanto en tiempo de paz como de guerra, cuando los periodistas no sólo pierden la vida en conflictos bélicos sino que en muchos casos son asesinados por organismos de seguridad, guerrillas o bandas de delincuentes organizados, a fin de poner término a las investigaciones sobre sus actividades delictivas.
Tarea en pro de periodistas que en ámbito nacional secundan, entre otras asociaciones civiles, la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, la Asociación Michoacana de Periodistas, AMIPAC, y la Asociación de Prensa y Fotógrafos de Jacona, A. C., APREFOJAC, al tener entre sus objetivos organizar a periodistas y al mismo tiempo posibilitarles el acceso a estudios de formación, capacitación y superación profesional, tanto para el ejercicio de su labor en concernientes negocios editoriales, y/o entidades de radio, televisión, agencias de noticias e Internet, como para que puedan incrementar o crear su propia empresa.
Corolario
Al quedar claro que la libertad de prensa es piedra angular de derechos humanos y garantía de las demás libertades, y que además de fomentar la transparencia, la rendición de cuentas y el buen gobierno, asegura que la sociedad goce del imperio de la ley y se rija por la justicia y la equidad, igual es evidente que prevalecen grupos de poder político, económico y social que cuestionan el valor de la libertad de expresión para el individuo, que no sólo aducen que ésta constituye una amenaza para la estabilidad y un peligro para el progreso, sino que llegan al extremo de considerar que es algo impuesto desde fuera y no la expresión autocrática de la exigencia de libertad del pueblo, argumentos desde luego nunca esgrimidos por los que carecen de poder sino por los que sí lo detentan, nunca por los que no tienen voz sino por aquellos cuyas voces son las únicas escuchadas, argucias cuya arbitrariedad señala la hora para que tal sinrazón se someta de una vez por todas a la única prueba que cuenta: la decisión del pueblo, en cuanto a saber más y no menos, ser escuchado y no acallado, estar de pie y no de rodillas.

Sin embargo, respecto a la conmemoración del 3 de mayo como Día Internacional de la Libertad de Prensa, es obvio que el logro de esa, como el de todas las demás libertades, nunca se le ha presentado a persona u organización alguna en bandeja de plata, sino que ha de ser conquistada paso a paso, palabra a palabra, con sustento en la fuerza de la razón.

1° de Mayo, Día del Trabajo, origen de su conmemoración internacional y mexicana. Eduardo Garibay Mares

1° de Mayo, Día del Trabajo, origen de su conmemoración internacional y mexicana

Eduardo Garibay Mares
Mayo 1 de 2015

El 1 de mayo de 1886 inició una huelga general de trescientos cuarenta mil trabajadores de Chicago, Estados Unidos, que fueron atacados por exigir una jornada laboral de ocho horas como máximo, derecho de huelga, libertad de reunión y expresión, y el derecho a una vida más humana y justa al través de mejores salarios.
Día de surgimiento de la lucha laboral por el que el Congreso de la Primera Internacional, celebrado en Ginebra, Suiza, acordó el 3 de septiembre de 1886 conmemorar el 1 de mayo como Día del Trabajo.
Primeras conmemoraciones del Día del Trabajo en la República mexicana
En México el Día del trabajo se rememoró por primera vez en la ciudad de Chihuahua en 1892, aunque sin trascender a otras poblaciones.

Fue hasta 1913 que durante el gobierno presidencial del golpista Victoriano Huerta, los afiliados a la Casa del Obrero Mundial, en un abierto desafío al usurpador conmemoraron el Día del Trabajo con una manifestación de 25,000 trabajadores en el zócalo de la capital del país, para expresar sus demandas laborales y su inconformidad con el régimen dictatorial.

Ley Electoral para votar a los 18 años de edad. Eduardo Garibay Mares

Ley Electoral para votar a los 18 años de edad

Eduardo Garibay Mares
Abril de 2015

Propicio es recordar que la juventud de México pudo ejercer su derecho democrático de votar a partir de los 18 años de edad, al entrar en vigencia el 29 de enero de 1970 el decreto reformador considerado legislativamente desde el 28 de octubre de 1969, antes de lo cual sólo se podía votar a los 18 años si la persona estaba casada mediante vínculo matrimonial civil, puesto que en soltería la mayoría de edad ciudadana se alcanzaba hasta cumplirse los 21 años.
Inicio de la etapa convulsa que perdura hasta hoy en día
Época de crucial y difícil contexto del país, devenido de la década de los años 60, en que la demanda por cambios en la democracia encabezó los reclamos políticos, sociales y educativos de sectores comprendidos en la burguesía, en la clase media, y en el movimiento estudiantil mexicano, cuyos enfrentamientos con gobiernos del Estado mexicano, federal y estatales, se localizaron de inicio, en 1963, en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, por el conflicto violento que puso en evidencia, además de la arbitraria intervención gubernamental en la administración académico-universitaria, la ominosa participación de partidos políticos en la vida interna de la universidad, mediante apoyos a profesores y respectivos grupos estudiantiles.
Situación agravada cuando fue muerto el joven Everardo Rodríguez Orbe, al organizarse el 2 de octubre de 1966 un mitin en contra de alzas al servicio urbano en Morelia, ya que el estudiantado fue dispersado a golpes y combatido con disparos de armas de fuego. Tiempos de movimientos estudiantiles que, generados también antes y después internacionalmente, igual surgieron entonces en el país en el Instituto Politécnico Nacional, en la Universidad Autónoma de Puebla, en la Universidad Autónoma de Nuevo León, en la Universidad Benito Juárez de Tabasco, y en la Universidad Nacional Autónoma de México, hasta culminar en otro 2 de octubre cruento: el de 1968 en Tlatelolco.
Ese fue el finiquito de la era del llamado “milagro mexicano”, sustentada en el desarrollismo capitalista, que posibilitó el crecimiento económico, aunado a la estabilidad política gestada por el esquema gubernamental iniciado desde la década de 1930, cuyos beneficios, al no dejar ser alcanzados por la mayoría de la población, hicieron de la evidente injusticia social el argumento teórico para allegarse condiciones a fin de lograr cambios democráticos, políticos, económicos, sociales y educativos.
Aniversario 45 de la generación que a los 18 años empezó a votar en 1970
Sin embargo, aquella juventud que en su soltería pudo votar a los 18 años de edad, y que en este 2015 llega a los 63 años, aparte de figurar en el padrón electoral y en estadísticas de la decreciente población votante y la creciente población abstencionista, nada ha podido hacer al ejercer su derecho ciudadano, para que dicho cambio democrático redunde en superiores niveles de vida de los sectores de población mayoritarios, ya que además de sufrir éstos a partir del año 1976 las consecuencias de las devaluaciones del peso frente al dólar, con incremento nacional de pobreza y de pobreza extrema, y de seguir afectados por deficiencias del sistema educativo oficial desde hace más de cuatro décadas, de lo que tienen certeza es que las únicas personas beneficiadas fueron las insertas en respectivos partidos políticos y grupos de poder, demandantes perpetuos de holgada participación electorera, mismos que capitalizan y usufructúan los recursos públicos que se les destinan.
Derechos ciudadanos y partidocracia mexicana
Así las cosas, al recordar que fue desde el 29 de enero de 1970 que a partir de los 18 años pueden votar, la encuesta nacional atañe a qué logros derivados de la democracia festejan los millones de mujeres y hombres ciudadanos, de pasadas y actuales generaciones, sujetos a una y otra legislación en materia de elecciones, quienes por ello hoy en día integran el padrón electoral, al constar sus nombres en el Catálogo General de Electores, conforme garantiza el artículo 173 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales: acordado por el Congreso de la Unión el 11 de diciembre de 2007, expedido por el titular del Poder Ejecutivo Federal el 11 de enero de 2008, y vigente a partir del 23 de enero de 2009.
Sí, el pueblo poderdante, porque democracia es demos, pueblo, y kratos, gobierno: el predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado. Y es por ello que al respecto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, conforme al texto vigente de la última reforma publicada el 13 de noviembre de 2007 en el Diario Oficial de la Federación, se señala en el artículo 34 respecto a la ciudadanía, que son ciudadanos de la República los varones y mujeres que teniendo la calidad de mexicanos, reúnan además los requisitos de haber cumplido 18 años y que tengan un modo honesto de vivir: la ciudadanía pobre y honrada que igual congrega prerrogativas democráticas, en respectivas dos primeras fracciones del artículo 35, como son, efectivamente, la de votar en elecciones populares, y, teóricamente, la de poder ser votada para todo cargo de elección popular, ya que en la realidad esto no es posible si no está alineada con algún partido político.
Votos sólo para lograr cargos y conservar el registro del partido
En la rememoración del 29 de enero de 1970, fecha a partir de la cual se consagró constitucionalmente el derecho del voto a partir de 18 años, es público y notorio que del incremento del padrón electoral los únicos beneficiarios son los partidos políticos, y por eso ellos son los que tienen que festejarlo, puesto que es de acuerdo a dicho padrón que se les asignan a cada uno de ellos cuantiosos y correspondientes recursos del erario nacional, sin que importe para ello el grado de abstencionismo en los comicios ni el número de votos respectivamente obtenidos, ya que los votos acumulados electoralmente sólo inciden en los puestos ganados y en la conservación o pérdida del registro como partidos.
Deshonrosas diputaciones “de representación proporcional” y “plurinominales”

A ello se debe el que se haya llegado a vivir una época peor, jamás imaginada por la juventud estudiosa y los luchadores sociales de los años 60 y 70: la de ahora, cuando es más difícil contexto del país y del universitario estudiante o egresado, mayormente porque la decisión acertada para la vida nacional es relegada por intereses partidistas, con miras siempre a lograr la supremacía en procesos electorales, como ocurre por las próximas elecciones federales a efectuarse el próximo 7 de junio de 2015, cuando sobre una nación asolada los partidos políticos festivamente se repartan, con las diputaciones ganadas mediante el voto mayoritario, o uninominales, las privilegiadas curules gratuitas como son las plurinominales, de los llamados diputados de partido, y las diputaciones de representación proporcional, de las que respectivamente gozan los partidos políticos desde 1963 y 1979, para desdoro de la democracia mexicana.

Agua de uso doméstico y teorías económicas fallidas. Eduardo Garibay Mares

Agua de uso doméstico y teorías económicas fallidas

Eduardo Garibay Mares
Miércoles 15 de abril de 2015

El servicio de agua para uso doméstico ha cambiado su objetivo de abastecer el preciado líquido para consumo en todos los hogares, razón de ser del organismo municipal obligado por ello a cumplir con eficacia y eficiencia el vital compromiso, el cual se trastoca al convertirse éste en una dependencia apropiada del usufructo tanto de la inversión que cada persona hace para contar con una toma de agua en su domicilio, como del cada vez más oneroso pago por el servicio, ingresos de los que se asignan dispendiosos sueldos los funcionarios administrativos de niveles superiores, muy por encima desde luego de los salarios que ahí devengan quienes trabajan en labores técnicas para funcionamiento y mantenimiento, o de oficina.
Una situación en torno a la cual tiene que ver la corresponsabilidad de los poderes fundamentales del Estado mexicano, persona jurídica, abstracta, que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos reconoce como sujeto de derecho, para el logro de objetivos de servicio público. Estado que para el alcance de los fines consagrados se vale de personas físicas que constituyen los órganos de la persona jurídica, como son: el Poder Legislativo, para decreto de leyes en el Parlamento; el Poder Judicial, para hacer cumplir la ley a través de la magistratura; y el Poder Ejecutivo, mediante organismos para la administración pública, a nivel federal y en cada uno de los 31 estados, con sus municipalidades, y en el Distrito Federal, con sus delegaciones.
Sin embargo, revertida la característica del Estado constitucional, sustentado en la ley que es primordial para la vida nacional, resulta obvio que al manifestarse en cada vez más gobernantes y autoridades de todos los niveles, la inclinación a regentar al arbitrio personal, tales individualismos absolutistas lastran al Estado mexicano e impiden la madurez democrática por la que a la luz de tres siglos ha luchado el pueblo de México.
Pueblo inversor de capital social debe ser copartícipe como accionista
Es el caso que para contar con una toma domiciliaria de agua potable, la persona financia un porcentaje de la tubería correspondiente no a los metros lineales del frente de su propiedad, como le ocurre al subvencionar la pavimentación de la calle, sino a la totalidad de metros cuadrados del terreno y construcción que posee, como a la par invierte en el costo de tubos de drenaje público, estructuras de las que el gobierno municipal se apropia y de las que hace usufructo, sin importar que cada propietario, al invertir en tal empresa, debe ser copartícipe, como accionista, de los beneficios del capital social.
Municipalidades de hoy, peor que la quijotesca ínsula de Barataria
Sí, un pueblo inversor copartícipe como accionista de la municipalidad, que continúa como un hecho a cumplirse, por el bien común, que ni el Quijote lo imaginó realizado en sus sueños más justicieros, ni Sancho Panza lo pensó al ser fugaz gobernador de la ínsula de Barataria, seguro porque en el tiempo de Miguel de Cervantes no se vivía en un Estado constitucionalista, donde en la municipalidad los encargados de la administración pública, asignándose salarios dilapidadores, hubiesen tomado como propia empresa mercantil el abasto de agua de uso doméstico, al aplicar un sistema similar al de accionistas, y copropietarios, para estructurar un negocio que sólo a ellos beneficia, insertos en la persona jurídica, al apropiarse del comercio con la abolición de derechos de la gente inversora del capital social, siempre excluida de los grandes negocios, sean gubernamentales o de la iniciativa privada.
Monopolizador Estado capitalista-socialista que no comparte con el pueblo inversor utilidades
Mal están las cosas y peor se vislumbran, cuando a conveniencia de respectivas autoridades de la administración pública, se ejecutan acciones que no atañen cabalmente a teoría alguna, cual ocurre con la economía capitalista, argüida por el Estado cuando admite la imposibilidad de desinteresarse totalmente de los asuntos económicos, y que por ello considera su deber intervenir en todos los casos en que se vea comprometida la libre competencia en los mercados e impedir, por ejemplo los monopolios, que sin embargo existen.
Mixtura y medianía de socialismo y capitalismo, causas de la parcial aplicación de la teoría económica socialista, cuando al abolirse la propiedad de la inversión de cada persona en la estructura del bien social, constituyente de las redes de abasto de agua potable, así como del drenaje y alcantarillado, en la dependencia municipal, capitalista en la práctica, no sólo no se reparten con el inversionista las utilidades obtenidas, sino que tal organismo cobra lo que le viene en gana, e igual incrementa el costo del servicio, sin tomar en cuenta el parecer de los socios inversores de capital, consumidores a la vez del vital líquido, puesto que está apropiado de todos estos factores productivos de ingresos: un arbitrario apoderamiento y usufructo del capital social, agravado por la impunidad con que se afecta mediante deficiencias del suministro. Flagrancia de arbitrariedad e incompetencia que implica la certeza de que los problemas de abasto de agua jamás se resolverán, en tanto la administración pública y sus funciones se alejen, cada vez más, del respectivo cumplimento a que el Estado constitucional está obligado.
Democracia ajena al beneficio de la población mayoritaria
Como cierto es que el sistema democrático está lejos de beneficiar al pueblo, igual es verdad que no se requiere ser economista para entender que la desarticulación de la desaparecida Unión Soviética se debió en gran medida al fracaso total de la aplicación del sistema de economía socialista o colectivista, y que hoy en día, principalmente a partir de los últimos meses del año 2014, las fallas del sistema de economía capitalista o individualista, tienen en vilo a los Estados Unidos y a los demás países.
Por eso, porque está mal y de malas la cuestión económica mundial, además de urgir una democrática revisión y correcta adaptación y aplicación de las teorías económicas, en México es vital encauzar al Estado constitucionalista en todos poderes y niveles de gobierno y administración pública, pues aunque la razón legal le asiste a la población mexicana, en la República prevalece la sinrazón del acomodo arbitrario de teorías económicas, siempre en detrimento de la población mayoritaria.
Población inversora, excluida en reparto de utilidades y abusada en cobros de servicio
Esto es, que no obstante ser inversora en la estructura para el domiciliario suministro de agua, al ser abolido su derecho como asociada por su aporte de capital, la población mexicana no sólo es víctima de cobros excesivos, por parte de autoridades municipales y con reconocimiento y aprobación de respectivos podres legislativos, sino que anualmente es abusivamente sometida a incrementos arbitrarios al costo del servicio, determinados unilateralmente por parte de entes de la administración pública, desligados de su obligación de servirla, que a la vez son causantes del deficiente abasto de agua en los hogares, así como de la falta de obras de drenaje y alcantarillado, indispensables tanto para la salubridad de su vida cotidiana, como para impedir que sus casas se inunden o sean arrasadas, año con año, por turbulentas corrientes de agua de lluvias torrenciales, que asimismo conllevan desbordadas aguas de desecho tanto habitacional, como industrial, aspecto en cuanto a desechos que por sus dañinas secuelas al medio ambiente nacional y mundial, merecen ser objeto de especializados estudios y propuestas.

La tarea a cumplir por parte del Estado mexicano es que la población inversora en el sistema para el servicio de agua de uso doméstico sea incluida en reparto de utilidades y deje de ser abusada en cobros excesivos por el servicio domiciliario.

Comunismo, pobreza y esperanza como factores para acceder al poder. Eduardo Garibay Mares

Comunismo, pobreza y esperanza como factores para acceder al poder

Eduardo Garibay Mares
Sábado 11 de abril de 2015

“Poderosas corrientes de pensamiento y acción que se entrechocaban durante la Revolución francesa, corrientes que tan íntimamente dependen de la naturaleza humana, que fatalmente han de reaparecer en los acontecimientos históricos del porvenir”. Pedro Kropotkine

Precursoras de la Francia revolucionaria, ideas comunistas señalaban que en las desigualdades de fortuna y en la acumulación de lo superfluo en manos de unos cuantos, radicaba el obstáculo para el establecimiento de la libertad democrática, siendo por eso que fueron formuladas desde el inicio de la Revolución resultante del proceso social y político que, iniciado en 1789, se desarrolló en la década culminada en 1799, año en que al estallido revolucionario del 14 de julio el pueblo se lanzó a la calle en abierta rebelión y tomó por la fuerza la Bastilla, fortaleza militar, prisión y símbolo del absolutismo monárquico, al cual el pueblo abolió al asimismo proclamar la República y eliminar las bases económicas y sociales del antiguo régimen.
Si bien la organización política de Francia osciló entre república, imperio y monarquía, durante los setenta y cinco años posteriores a la primera República, luego que ésta cayera tras el Golpe de Estado napoleónico, lo cierto es que la Revolución Francesa marcó el final definitivo del absolutismo y dio a luz a un nuevo régimen donde las masas populares, en algunas ocasiones, y luego la ciudadanía, se convirtieron en la fuerza política dominante en el país.
República y electores
Desde entonces, además de exigir el derecho de todos a la posesión del suelo y la igualación de las fortunas, en tratados en torno a electores se afirmaba: primero, que la igualdad de los derechos políticos no daría nada sin la igualdad de hecho; y segundo, que la igualdad representa la finalidad del arte social, puesto que la desigualdad de las riquezas, la desigualdad de estado y la desigualdad de instrucción son causa principal de todos los males.
Tiempos en que igual se plantearon reivindicaciones del proletariado, cuando la idea de clases distintas con intereses opuestos fue expresada claramente por Lambert, el llamado “amigo de los que no tienen nada”, que en su obra Cuaderno de los pobres comprendió desde trabajos productivos, salario suficiente y lucha contra el dejar hacer de economistas burgueses, hasta la oposición de la cuestión social a la cuestión política, con sustento en que no había ni habría jamás sino dos clases distintas de ciudadanos: los propietarios y los no-propietarios: los primeros dueños de todo, y los segundos sin poseer nada. Tiempos en que al preguntar: de qué servirá una Constitución sabia a un pueblo de esqueletos descarnados por el hambre, la única respuesta asimismo era: de nada.
Por eso fue que tras la toma del Palacio de las Tullerías, el 10 de agosto de 1792, y más todavía luego de la ejecución del rey Luis XVI, el 21 de enero de 1793, la resuelta propagación de tales ideas causó temor entre los ardientes defensores de la propiedad, por la influencia que causaba en París dicha propaganda comunista e igualitaria, que conllevó a pronunciamientos tanto para contrarrestarla, como fue el caso de la propuesta del plan de mutualidad, de seguro entre todos los ciudadanos, opuesto a todo lo que pudiese hundir al trabajador acomodado en un estado en que se viese obligado a vender su trabajo a vil precio, como para consolidarla, al proponerse despojar a los ricos de sus grandes fortunas, ya fuese por un impuesto progresivo o imponiéndoles por la ley una derivación natural, de lo superfluo, hacia los establecimientos de utilidad pública, dado que las grandes riquezas constituían un obstáculo opuesto a la libertad.
Socialización de tierra, industrias, productos y comercio
Más allá iban las ideas de quienes luchaban porque ningún ciudadano poseyese más de una cantidad fija de tierra, y que nadie heredase más de determinada cantidad de dinero, por considerar que la causa primera de los males sociales consistía en que había hombres que se hallaban bajo la dependencia directa y no recíproca de otro, y que era así como se formaba el primer eslabón de la cadena de la esclavitud. Mismos que no sólo se burlaban de las pequeñas propiedades fragmentarias que se querían dar a los pobres, cuya existencia siempre sería por ello precaria y miserable, puesto que se prestaba a que quedasen al arbitrio de quien así los hacía dependientes; sino que igual exigían instrucción integral, enseñanza de un oficio manual a cada adolescente, restitución de propiedades por la revolución, y limitación del derecho de propiedad. Revolucionarios que tendían a la resolución igualitaria en un sentido social, y por ello portavoces de movimientos comunalistas y comunistas, así como de movimientos también contra los agiotistas, cuya idea después sirvió de base al mutualismo y al Banco del Pueblo de Proudhon, cuyo propósito consistía en que todo beneficio resultante del cambio en los bancos, recayese en toda la nación, no en particulares, puesto que resultaban de la confianza pública de todos en todos.
Aunque con clara superioridad por ir derecho al objeto, al incidir en la repartición de los productos, el comunismo no se presentó en 1793 con el conjunto doctrinal adquirido después, sino emergido sólo en torno al problema de las subsistencias y al problema de la tierra, las necesidades del momento. Sin embargo, en él se encuentran ya los tres aspectos principales del comunismo: el de la tierra, el de la industria, y el del comercio y del crédito, no obstante aparecer fragmentario, subjetivo, y bajo aspectos diversos, e igual permanecer parcial, puesto que admitía posesión individual al lado de la propiedad comunal y también, tras proclamar el derecho de todos a los productos de la producción, asimismo reconocía un derecho individual sobre lo superfluo, al lado del derecho de todos sobre los productos de primera necesidad.
Comunismo, democracia y bienestar
Así fue que tras el triunfo revolucionario, al grito de ¡Libertad, Igualdad y Fraternidad!, hubo quienes trataron de poner en práctica dichas ideas, entre 1789 y 1793, de hecho y por la acción de las fuerzas locales sobre el terreno, mediante la unión directa de ciudadanos de todos los municipios de la República; siendo ellos mismos los que pretendían asegurar las conquistas de la democracia con un movimiento hacia el comunismo, esto es, al deslizar el comunismo en la democracia, a pesar de que ya se había evidenciado que la democracia perdería sus conquistas, si el pueblo no entraba al campo dispuesto para las competencias democráticas.
Estrategia a la que no obstante aunaron la creencia de que se podía llegar al predominio del comunismo, por la acción de algunos que se apoderasen del gobierno a través de un grupo activista, el cual llegaba hasta poner su fe en un individuo que tuviese la firme voluntad de introducir el comunismo por el bien de los pobres: ilusión funesta sostenida durante el siglo XIX, causante del Cesarismo o Golpe de Estado, de la fe en Napoleón, de la fe en Benjamín Disraeli, es decir, de la persistente esperanza, hasta hoy ominosa, en un gobernante salvador.


Pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Eduardo Garibay Mares

Pasión, muerte y resurrección de Jesucristo

Eduardo Garibay Mares
Abril 2 de 2015

La estatura moral de las personas crece o disminuye según las palabras que pronuncian y los mensajes que eligen oír. En consecuencia, los agentes de la comunicación, los padres y los educadores tienen especial necesidad de sabiduría y discernimiento en el uso de los medios de comunicación social, pues sus decisiones influyen en gran medida en los niños y en los jóvenes, de los que son responsables y que, en definitiva, son el futuro de la sociedad”. Juan Pablo II

Evocar la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, a lomos de un borrico, igual es preludio de su pasión, muerte y resurrección, al recordar el Domingo de Ramos, anterior al de Pascua, con procesiones y bendición de hojas de palma y ramas de olivo la majestad del Hijo de Dios hecho Hombre, venido al mundo para liberar a la humanidad de las cadenas de esclavitud del mal, en cumplida promesa de una liberación que estuvo muy por encima de las pretensiones de aquellos judíos, ávidos del mero triunfo terreno que los liberase del yugo romano.
Semana Santa
Transcurrida del Domingo de Ramos al Domingo de Resurrección, las tres partes esenciales de la Semana Santa son: una, el final de la Cuaresma, constituido por el Lunes, Martes y Miércoles Santos.
Dos, el Jueves Santo, en que Jesús lavó los pies a sus discípulos en señal de humildad, e instituyó luego la Eucaristía, y en cuya noche se dio la Oración del Huerto, donde la contemplación del dolor de Jesús estremece y deja ver la profundidad de la Pasión a sufrir tras su Prendimiento.



Pletórica la Catedral de fervor religioso en la anual Visita de los 7 Templos, en Morelia, Michoacán. FOTO: Eduardo Garibay Mares



Y tres, el Triduo Pascual, que comprende: primero, el Viernes Santo, con su Viacrucis de flagelación, juicio, caminata al calvario y crucifixión, donde su muerte cubrió al mundo de tinieblas, y cuando luego de que la Virgen María, su madre dolorosa, recibió su cuerpo, fue sepultado por José de Arimatea; segundo, el Sábado Santo, de su estancia entre los muertos, y tercero, el Domingo de Pascua, de su resurrección, esto es, del pasar de la humillación a la gloria y de las tinieblas a la luz, a fin de llevar a la humanidad de la esclavitud al mal, física, mental y espiritualmente, a la liberación del bien.


Jesucristo, en la Procesión del Silencio, en Morelia, Michoacán. FOTO: Eduardo Garibay Mares

Virgen de los Dolores, en la Procesión del Silencio, en Morelia, Michoacán. FOTO: Eduardo Garibay Mares

Cristo crucificado, muerto y resucitado
Precedida por los 40 días de Cuaresma, y preparada también con el Jueves Santo, cuando al lavar los pies de sus discípulos Jesús mostró con su humildad que no vino a ser servido, sino a servir, e instituyó el sacramento de la Eucaristía, en la Última Cena con los apóstoles, la celebración del Triduo Pascual comprende: primero, el viernes, de la Pasión y Muerte de Jesús crucificado en el Gólgota; segundo, el sábado, de Jesús sepultado, y de Vigilia Pascual en la noche del sábado al domingo, y tercero, el Domingo de Resurrección, evento jubiloso de Pascua, en una celebración prolongada a 50 días hasta Pentecostés, fiesta de la llegada del Espíritu Santo.


Jesús Nazareno. Iglesia Santa Clara de Asís, en Santa Clara del Cobre, Michoacán. Sábado 4 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares

Iglesia Santa Clara de Asís, en Santa Clara del Cobre, Michoacán. Sábado 4 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares


Como celebración más importante de todo el año litúrgico cristiano, la Vigilia Pascual es la noche en que se bendice el Fuego Nuevo y el Cirio Pascual, símbolos de luz y purificación, se canta el Anuncio de Pascua, se lee el Antiguo Testamento, sobre todo acerca de la primera pascua judía, ocurrida con la salida de los hebreos esclavos de Egipto y su éxodo hacia la Tierra Prometida, habiendo de pasar el Mar Rojo, y se finaliza con el canto del Aleluya, la proclamación el Evangelio de Resurrección, la bendición de fuentes bautismales, el bautizo de personas, la renovación de promesas de bautismo, y la Eucaristía Pascual, a repetirse cada domingo, para revivir la Resurrección de Cristo, que es el centro de la fe cristiana.


Jesús Nazareno. Templo Santa Clara de Asís, en Santa Clara del Cobre, Michoacán. Sábado 4 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares


Jesús Nazareno. Templo Santa Clara de Asís, en Santa Clara del Cobre, Michoacán. Sábado 4 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares




Jesucristo. Iglesia Purísima Concepción de María, en Santa Clara del Cobre, Michoacán. Sábado 4 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares


Pascua en Tierra y Universo
La Pascua de Resurrección conmemora la resurrección de Cristo, y la fecha de su celebración varía entre el 22 de marzo y el 25 de abril, ya que tiene lugar el domingo siguiente a la primera luna llena de primavera, del hemisferio norte. Término religioso que en el castellano procede del latín páscae, y éste a su vez del griego paska, originados a partir del hebreo pésaj, pascua significa «paso» dado que, efectuada dicha fiesta desde la antigüedad por todo el pueblo de Israel, todavía es celebrada por los judíos tal como lo hicieron los hebreos por orden de Moisés, la víspera de su éxodo de Egipto, hace aproximadamente tres mil años, y donde uno de los elementos esenciales también lo es el pan no fermentado.
Liturgia y religiosidad popular
Las manifestaciones de religiosidad popular en la Semana Santa, también denominada Mayor o Grande, tienen su expresión plástica en las procesiones y admirables representaciones que muchos pueblos cargados de historia, fe y religiosidad ofrecen en calles, plazas y otros lugares públicos. De ahí que en ritos eclesiásticos, en costumbres y tradiciones religioso-seglares, y/o en viajes y recorridos turísticos de creyentes o profanos, no se viva en plenitud la Semana Santa sin ser partícipe o espectador de eventos en torno a la pasión, muerte y resurrección del Nazareno.


Cardenal Alberto Suárez Inda, Arzobispo de Morelia. Misa de Domingo de Resurrección. 6 de la tarde del 5 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares

A la luz de los siglos, en ámbito nacional e internacional ha sido tradicional la representación de la Pasión y Resurrección de Jesucristo, comenzando por la procesión de los ramos el domingo y prosiguiendo con representación de eventos documentados bíblicamente en torno al Lavatorio de Pies, a la Última Cena, al Prendimiento, al Viacrucis, la Crucifixión, y la Resurrección, dramatizaciones que desde la antigüedad han calado hondo socio-culturalmente y que asimismo se complementan con la Visita a los Siete Templos, el Sermón de las Siete Palabras, y el Viacrucis, entre otras actividades populares, a las que en la República Mexicana la tradición y cultura popular aportó la quema de los Judas en la noche del Sábado Santo, los cuales son figuras artesanales elaboradas con papel, carrizo y cáñamo, que contienen en su interior un detonante de pólvora. Judas que se cuelgan y hacen explotar al «abrirse la Gloria», prendiendo la mecha, y que se elaboran con la forma de diablos o que representan a personajes vigentes negativamente en la opinión pública.
Corolario

Para la Iglesia Católica es en el Misterio Pascual que Dios Padre, por medio de Dios Hijo, y el Espíritu Santo intercesor, se inclina sobre cada hombre ofreciéndole la posibilidad de la redención del mal y la liberación por el bien. Una Pascua que igual Jesús celebró todos los años durante su vida terrena, según el ritual en vigor entre el pueblo judío, hasta el último año de su vida, en cuya postrer y anticipada Pascua instituyó la Eucaristía, en su Última Cena con los doce apóstoles, donde el hijo de Dios dio a la conmemoración tradicional de la liberación del pueblo judío un sentido nuevo y mucho más amplio, ya que no fue sólo a un pueblo ni a una sola nación, a quien liberó, sino a la humanidad, a la posibilitó una vida óptima y superior, cuando con su vida, obra y resurrección legó la vocación y misión cristiana de unir a todos los hombres, que jamás deben perder la esperanza en la victoria del bien sobre el mal.


Cardenal Alberto Suárez Inda, Arzobispo de Morelia. Misa de Domingo de Resurrección. 6 de la tarde del 5 de abril de 2015. FOTO: Eduardo Garibay Mares

Semana Santa de Eucaristía, muerte y resurrección de Jesús. Eduardo Garibay Mares

Semana Santa de Eucaristía, muerte y resurrección de Jesús

Eduardo Garibay Mares
Marzo 30 de 2015

Celebrado en el ámbito mundial, el intervalo de tiempo comprendido entre el Domingo de Ramos y la Pascua es conmemorativo de la última semana de la vida mortal de Jesucristo: la Semana Santa, en la que, tradicionalmente, el jueves es el día de la Última Cena, en que Jesús instituyó la Eucaristía; el viernes es el día de la Pasión y Muerte de Jesucristo, el sábado es el día que culmina con la noche de Vigilia de Pascua, donde se efectúa la bendición del nuevo fuego, la iluminación de lámparas y velas y del cirio pascual, cuya llama simboliza la luz de Cristo Resucitado en el día domingo, cuando la gran festividad de la Resurrección de Jesús inicia el gozoso tiempo pascual y se tañen todas las campanas, en proclama de la resurrección del Mesías Hijo de Dios, muerto en la cruz por la salvación de la humanidad y la paz al universo entero.
Bíblicamente, conforme al Antiguo Testamento, la fiesta de Pascua conmemora la salida del pueblo de Israel de Egipto, donde era esclavo, a fin de volver a vivir la intervención de Dios para salvarlo de la opresión, guiarlo, e iniciarlo en un periodo de vida en libertad. Memorial que con la llegada del esperado Mesías se dio, de acuerdo al Nuevo Testamento, con la Pascua de Jesús, quien en el banquete pascual con sus apóstoles dio sentido definitivo a la Pascua, que desde entonces es memorial de la salvación de la humanidad, que revive lo realizado por Jesús con su vida, su muerte sacrificial, y su resurrección, hechos con los que constituyó Jesucristo la celebración del nuevo éxodo: el de la salida a una vida nueva, por el camino hacia Dios Padre.
Misterio eucarístico sacramental
Recuerdo y actualización de la obra de salvación, de la Pascua, la Eucaristía, que en griego significa acción de gracias, es el nombre que se da al Santo Sacramento del Altar, que recoge su doble aspecto de sacramento y sacrificio de la misa, y en el cual Jesucristo está realmente presente mediante el pan y vino.
Porque en la cena de la Pascua Jesús tomó pan y bendiciéndolo, lo partió, y se los dio a sus discípulos diciendo: Tomen y coman, este es mi cuerpo, que por ustedes será entregado a la muerte; y tomado el cáliz con vino, dando gracias, se los dio a sus apóstoles diciendo: Tomen y beban, esta es mi sangre, la cual será derramada para el perdón de los pecados; hagan esto en memoria mía. Instituyendo así Jesús la Eucaristía como memorial de su muerte y resurrección, con lo que se vive, al rememorarlo, el sacrificio único del Hijo de Dios por la salvación de la humanidad: el Santísimo Sacramento del Altar, uno de sus más elevados misterios que por su majestad e incomprensibilidad acompaña a los misterios de la Trinidad y la Encarnación; tres misterios que constituyen la triada que sustenta la fe de los millones de creyentes integrados a la milenaria Iglesia Católica.
Misterio eucarístico en el que se descubre el modo prodigiosamente condescendiente en que Jesucristo responde al apetito natural del corazón humano, con un alimento para la inmortalidad, al entregar su humanidad: la propia carne y sangre de Dios hecho hombre, que están verdadera, real y sustancialmente presentes en la eucaristía para alimento del alma y su vida eterna, en virtud de la transubstanciación del pan y el vino en el Cuerpo y la Sangre de Cristo Resucitado, mediante el incruento sacrificio del Cordero Eucarístico en la misa.
Misa en que la persona comulga para su salvación con el pan y el vino sacramentales. El primer elemento es el pan de harina de trigo, horneado: la hostia; pan sin levadura: fermentum, zymos; pan no fermentado, que es pan de trigo cuya preparación no requiere levadura o polvo para hornear; pan ácimo, formado por una mezcla de harina de trigo y agua amasada, y luego horneada; pan ácimo símbolo de la pureza del cuerpo de Jesús, libre de toda corrupción de pecado, y representativo de la Pascua vivida no con la levadura de la malicia y la corrupción, sino con plena sinceridad y verdad, pura, cual pan ácimo. El segundo elemento es el vino de uva, fruto de la vid, que implica el ejemplo y mandamiento de Jesús, quien en la Última Cena convirtió en su sangre el vino natural de uva contendido en el cáliz bendecido, y se los pasó a sus discípulos para que lo bebiesen.
Esto es, que Jesús instituyó la Eucaristía, como sacramento, con la consagración del pan y del vino al decir: “…Este es mi cuerpo… esta es mi sangre”, que contienen la completa y entera fuerza de transubstanciación; y al mandar: “Hagan esto en conmemoración mía”; a fin de perpetuar, como frutos de la comunión: primero, la unión de Cristo por amor, puesto que Jesús designó la idea de la comunión como una unión de amor, al afirmar: el que come mi carne y bebe mi sangre, habita en mí y yo en él; segundo, el alimento espiritual del alma de la persona que comulga, merecidamente, ya que la eucaristía no confiere por sí misma el estado de gracia a la persona, sino que presupone tal estado en ella, y por eso es imposible para la persona que esté en estado de pecado mortal recibir la comunión, con beneficio, como igual es imposible para un cadáver asimilar alimento y bebida; y tercero, la resurrección de las personas para la felicidad eterna, que Jesús prometió al afirmar: el que come mi carne y bebe mi sangre tendrá vida perdurable, y lo resucitaré el último día.
Corolario
Aunque devenida en tiempo de asueto para el descanso, la diversión o el turismo, la Semana Santa, tiempo para la meditación en torno al memorial bíblico, igual es época en que se representan respectivos pasajes de la historia sagrada, con participación de poblaciones enteras, donde son escenario calles, templos y parajes del lugar, en tanto que unas personas son protagonistas y otras espectadoras de la vívida Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Precedida por el Domingo de Ramos, la Semana Santa culmina la Cuaresma, periodo de 40 días que, iniciado el Miércoles de Ceniza, igual es tiempo para la penitencia, en el que es tradición popular de la gente ofrecer como sacrificio y con la intención de reformarse para siempre, por considerarlo hábito nocivo, abstenerse de comer, tomar o de hacer lo que más les gusta: tomar café o refrescos; comer pasteles o golosinas; así como fumar, ingerir bebidas alcohólicas, ir al cine, ver televisión, etcétera.

Esto es, que más allá de conllevar sólo a un temporal cambio, donde uno de los extremos: negativo, es lo contrario al otro: positivo, y ambos se suceden uno a otro, como al día la noche, al volver y recaer en lo mismo, este tiempo atañe a condiciones para la conversión plena, la transformación total de la persona para ser mejor, y en la que el extremo negativo deja de ser lo que es y se convierte en lo positivo, sin regresión: cual ocurre con la transubstanciación, cuando el pan y el vino convierten en el eucarístico cuerpo y sangre de Cristo, quien murió en la cruz y resucitó por la salvación de la humanidad y la paz universal.